LA PIEDRA EN EDIFICIOS DE MADRID
Los estratos de la caliza de Colmenar de Oreja tienen un espesor total de entre ocho y doce metros y aparecen en capas subhorizontales, cada una con un nombre tradicional: el Cabezal es la capa superficial, y siguen el Banquillo, el Sobrebanco, el Banco Gordo, el Banco de Levante y el Banco Vidrioso. El Cabezal es de caliza terrosa y fragmentos de caliza dura de un grano muy fino, que parece marfil. El Banquillo, Banco Gordo y Banco de Levante son las capas de las que más piedra se ha extraído.
Generalmente la explotación era de interior. Es decir, se excavaban galerías que se sostenían con pilares y se abrían pozos verticales para iluminar y ventilar el interior de la cantera. El método extractivo se basaba en abrir una galería en el Banco de Levante y mediante cuñas introducidas en el techo, el Banco Gordo se desmoronaba. Se continuaba avanzando en el Banco de Levante y se volvía a actuar sobre el techo. Cada banco se excavaba dependiendo del uso al que se destinaria su piedra. Por ejemplo, para las esculturas se utilizaba la piedra del Banco Vidrioso, que por su carácter micrítico (cemento de menor tamaño de cristal) era el más apto para tal fin. Hoy en día la caliza de Colmenar de Oreja se explota a cielo abierto.
La iglesia parroquial de Santa Maria la Mayor de Colmenar de Oreja (1579) se construyó con la caliza de esta localidad. A partir del siglo XIV la piedra de Colmenar se utiliza en edificios de Madrid, tal es el caso del monasterio de San Jerónimo el Real (1505), el Casón del Buen Retiro (1637). Su uso se incrementó en el siglo XVIII por el gusto de combinar esta piedra blanca con el granito gris. El catastro del marqués de la Ensenada de 1752 indica que existían diecisiete canteras en Colmenar de Oreja, y el catastro del Cardenal Lorenzana (hacia 1780) menciona su buena calidad, grosor y abundancia.
Esta piedra se ha utilizado en elementos decorativos del Palacio Real (1735-1764), tales como zócalos, columnas, pilastras, comisas, antepechos, dinteles, jambas y balaustradas. Así como en las estatuas de los reyes de España destinadas a decorar su cornisa superior y que hoy adornan la plaza de Oriente, el paseo de Argentina del parque del Retiro y los jardines de Sabatini. La caliza de Colmenar de Oreja también se ha utilizado en las fachadas de la iglesia de Santa Barbara y en el convento de las Salesas Reales (1750-1758), en la Real Basílica de San Francisco el Grande (1761-1784), en la Real Casa de Correos (1760-1768) y en la Real Aduana (1761-1769). En la Puerta de Alcalá (1769-1778) se ha utilizado para esculpir los angelotes, escudos, armas, yelmos, tarjetones con relieves de cornucopias y motivos florales, así como para las bases y capiteles de las columnas.
El Real Jardín Botánico (1781), el Museo Nacional del Prado (1785), el Real Observatorio de Madrid (1785), el oratorio del Caballero de Gracia (1786-1795), la Puerta de Toledo (1817) y Teatro Real de Madrid (1818-1850) muestran sillares de la caliza blanca de Colmenar de Oreja. Los surtidores con forma de dragón y oso, diseñados para la fuente de Cibeles en 1791, también están tallados en esta caliza. La Biblioteca Nacional de España (1866-1869), la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Minas y Energía (1886) y el Palacio de Fomento (1897) también muestran elementos tallados en la piedra de Colmenar de Oreja. Su producción disminuye a principios del siglo XX, debido al auge del granito. Aunque la apertura del ramal del tren entre Colmenar de Oreja y Arganda en 1903 impulsó su consumo, destacando el denominado marmolillo muy utilizado para arte funerario en el cementerio del Este de Madrid (inaugurado en 1884). Elementos estructurales como los de la casa modernista Pérez Villaamil (1907) de la plaza Matute están tallados en caliza de Colmenar de Oreja, utilizada también en la Casa de Velázquez (1928) y en la reconstrucción la de la iglesia de San Sebastián (1943 y 1959), entre otros importantes edificios madrileños.
IMAGENES DE ALGUNOS EDIFICOS CON PIEDRA DE COLMENAR

Iglesia de Colmenar de Oreja (1579)

Monasterio de San Jerónimo el Real (1505)

Casón del Buen Retiro (1637)

Palacio Real (1735-1764)

Iglesia de Santa Barbara (1750-1758)

San Francisco el Grande (1761-1784)

Real Jardín Botánico (1781)

Museo Nacional del Prado (1785)

Real Observatorio de Madrid (1785)

Caballero de Gracia (1786-1795)

Puerta de Toledo (1817)

Teatro Real de Madrid (1818-1850)

Surtidores con forma de dragón y oso, diseñados para la fuente de Cibeles en 1791

Biblioteca Nacional de España (1866-1869)

Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Minas y Energía (1886)

Palacio de Fomento (1897)

Casa de Pérez Villaamil (1907)

Casa de Velázquez (1928)

Iglesia de San Sebastián (1943 y 1959)

Banco de España

Edificio España alternando ladrillo y piedra caliza de Colmenar
Fuente:
https://www.researchgate.net/publication/340897974_Madrid_y_sus_piedras_Desde_las_canteras_historicas_hasta_su_puesta_en_obra